La Constitución de la República Bolivariana de Venezuela de 1999 fomenta la utilización de los medios alternativos de resolución de conflictos (artículos 253 y 258) a los fines de dar solución pacífica a las controversias. Por eso, distintos procesos tanto judiciales como extrajudiciales han promovido su uso.

En 2011, al dictarse la Ley Orgánica de la Jurisdicción Contencioso Administrativa (LOJCA), y siguiendo los parámetros constitucionales, ésta incluyó la conciliación dentro del proceso contencioso administrativo para ofrecer alternativas de solución a las disputas, de forma ágil y usando la menor cantidad de recursos del Estado.

Partiendo de la norma, el autor analiza la aplicación de la conciliación en los distintos procesos de la práctica forense contencioso administrativa, destacando el papel del juez y sus facultades en la búsqueda de una solución para las partes. También, alerta sobre las limitantes que tiene la conciliación en estos procesos y su improcedencia en aquellos casos en los que están prohibidas las transacciones (pues solo resulta aplicable a controversias susceptibles de transacción); y más allá de esto, la efectividad que pudieran tener los acuerdos celebrados cuando impliquen la nulidad del acto impugnado, su renovación, que se dicte un acto diferente, o  la celebración de un nuevo contrato o modificación del original que dio lugar a la controversia. Finalmente, deja abierta la posibilidad para que se utilicen nuevas fórmulas técnicas y empíricas que permitan darle un uso más efectivo a las gestiones conciliatorias contencioso administrativas.

FORMAS DE REFERENCIAR LA OBRA: Aguilar, R.A. (2011). La conciliación en el proceso contencioso administrativo. En: El Contencioso Administrativo y los Procesos Constitucionales. Colección Estudios Jurídicos Nº 92. Caracas: Editorial Jurídica Venezolana.

PALABRAS CLAVE: conciliación, contencioso-administrativo, LOJCA, conflicto, controversia.